Título original: Exhuma

Año: 2024

Duración: 134 min.

País: Corea del Sur

Dirección: Jang Jae-hyun

Guion: Jang Jae-hyun

Reparto: Kim Go-eun, Choi Min-sik, Lee Do-hyun, Yoo Hae-jin

Música: Kim Tae-seong

Compañías: Showbox Entertainment, MCMC, Pinetown Production. Distribuidora: Showbox/Mediaplex, Purple Plan

Género: Thriller. Terror. Intriga | Sobrenatural

Sinopsis

Una renombrada chamana (Kim Go-eun) y su aprendiz son contratados por una enigmática familia adinerada para investigar la enfermedad sobrenatural que afecta a su hijo primogénito. Con la ayuda de un embalsamador y el experto en feng shui más famoso del país (Choi Min-sik), rastrean una tumba familiar oculta, ubicada en tierra sagrada. Percibiendo un aura ominosa alrededor del lugar, el equipo opta por exhumar y reubicar los restos ancestrales de inmediato. Pero algo mucho más oscuro emerge en la remota montaña, desatando fuerzas sobrenaturales que amenazan con destruirlos a todos.

Opinión

Si algo comparte México y Corea es el respeto que se le profesa a los muertos, tanto a su espíritu como a los restos, así como las tradiciones que giran alrededor de las almas de quienes se han ido y que no siempre se han dado cuenta que ya no pertenecen al mundo de los vivos. Es a través de estas creencias y ritos que esta historia de misterio y mucho horror inicia.

La historia gira en torno a las costumbres coreanas y los rituales alrededor de una exhumación, la cual tiene el propósito de liberar a una familia de la maldición que los aqueja. El ritmo inicia lento, como es costumbre en el cine asiático, dándonos oportunidad de conocer un poco sobre los protagonistas, su rutina, sus poderes y también sus ambiciones.

El tener personajes con matices hacen que sea más fácil empatizar con ellos e involucrarse en la historia. Esto fue gracias al compromiso de Kim Go-eun y Lee Do-hyun quienes nos presentaron un retrato realista de la vida de un chaman, mezclando una rutina cotidiana de dos adultos jóvenes, pero también el misticismo que rodea sus trabajos.

Hay escenas realmente perturbadoras que logran transmitir la atmósfera, manteniendo los efectos especiales al mínimo y utilizando con precisión el maquillaje, las tomas y el poder de la atmósfera que se creó tras recitar los sutras reales que el equipo de preparación, conformado por chamanes reales, insertó para dar realismo.

El plot twist es algo que no se veía venir y que sin duda explora más el camino del terror sobrenatural al que estamos acostumbrados y logra contar una historia redonda que sin duda hacía mucho no llegaba a cines y nos recuerda por qué el cine oriental destaca cuando presenta una cinta bien hecha y estructurada que se enfoca más en su contenido que en lo que se ve en pantalla.